BLANQUEAMIENTO DENTAL
¿Los métodos caseros funcionan realmente?
Por Dra. Natasha Riquelme B. /Cirujano Dentista-Especialista en Periodoncia e Implantología
Ya todos sabemos que diciembre llega lleno de celebraciones, fotos, cenas y brindis, y es normal que muchas personas quieran mostrar una sonrisa luminosa para cerrar el año con su mejor versión. Pero en redes sociales abundan consejos de métodos “instantáneos” que prometen resultados milagrosos. ¿Cómo saber qué sirve y qué no?
Como odontóloga, mi recomendación es considerar el blanqueamiento dental con información clara, expectativas realistas y, sobre todo, con seguridad.
LOS MÉTODOS CASEROS POR QUÉ NO SON UNA BUENA IDEA
Limón, bicarbonato, carbón activado y otros trucos populares siguen circulando porque parecen rápidos y económicos. El problema es que todos esos “raspan” y desgastan el esmalte, dejándolo más delgado, más sensible y más susceptible a manchas futuras. Sí, pueden dar la impresión de dientes más claros por unos días, pero a un costo que nadie debería pagar, porque un esmalte dañado no vuelve a crecer.
TRATAMIENTOS PROFESIONALES: CÓMO FUNCIONAN Y CUÁNDO ELEGIRLOS
El blanqueamiento dental seguro utiliza peróxidos en concentraciones reguladas, aplicados bajo evaluación profesional. No “raspa” ni desgasta el diente; actúa químicamente sobre los pigmentos internos.
Es importante que sepas que antes es imprescindible evaluar la boca completa. Una caries, retracción o esmalte dañado puede volver el tratamiento doloroso o incluso contraindicarlo.
Además, hay casos en los que el blanqueamiento no es la primera opción, como en el embarazo o lactancia, hipersensibilidad severa, caries sin tratar, pacientes en quimioterapia o radioterapia, manchas por tetraciclina muy avanzadas (pueden requerir carillas u otras opciones).
Un blanqueamiento profesional bien indicado, realizado con supervisión, es seguro y puede mejorar la estética sin comprometer la salud del esmalte.